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La Sucesión Bajo el Populismo

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LA SUCESIÓN BAJO EL POPULISMO
Publicado el 31/07/2012
Por Escenarios Alternativos
La pelea por el 2015 ya se instaló en condiciones económicas que el kirchnerismo desconoce. El unicato en jaque por la incertidumbre del futuro cercano y las necesidades de establecer la continuidad. Mauricio Macri, en las sombras, no gestiona más que su imagen y se victimiza como Daniel Scioli.

Los populismos se topan, más temprano que tarde con el problema de la sucesión. Basados en liderazgos fuertes, desapegados a las normas, a las que amoldan a sus deseos. Como antes Silvio Berlusconi en Italia, Hugo Chávez; y Cristina Kirchner, sufren con la sola idea de que abandonarán el poder a manos de alguien que seguramente no continuará su obra, o no lo hará tan bien como ellos creen.

También es sustancial al populismo el trabajo del coro estable de cada corifeo que empuja los límites que haya que empujar para seguir ocupando los puestos del Estado al que “le están dando un rumbo fundacional”. Personajes dramáticos como el vicegobernador de la provincia de Buenos Aires Gabriel Mariotto, salen al cruce de las aspiraciones presidenciales de cualquiera que no sea la “líder espiritual”, tal como ha definido a Cristina Fernández de Krichner, el senador Aníbal Fernández. En la media sombra empujan la re reelección de la presidente, la única que asegura su estabilidad como adláteres del poder.

La rotura de la posibilidad del tándem Néstor-Cristina, abrió el juego al abismo de la sucesión. La presidente tapa con su política de anuncios y discursos, su condición de “pato rengo” y hasta muestra signos de hastío, de despreocupación con humoradas y gestos nada protocolares, pero que la “acercan al pueblo”. Necesita un sucesor, pero no lo puede nombrar ahora, ni tolera que alguno se presente como tal ante la sociedad.

Ya hace más de dos meses que la presidente puso en marcha un trabajo conjunto entre el Ministerio de Desarrollo Social y de Seguridad, a “cargo” de Sergio “Conintes” Berni, en el primer cordón del conurbano bonaerense para instalar la figura de Alicia Kirchner y su agrupación Kolina – la misma que presentó afiliaciones falsas en la provincia de La Rioja – como posible sucesora. Todavía no recoge los niveles de adhesión esperados, pero la cuñada sería una candidata potable. En última instancia, podría hacer fuerza en la provincia de Buenos Aires, en donde podría darse un Kolina versus Karina.

En derredor al espacio del unicato cristinista, sobrevuelan las aspiraciones del cada vez más notorio Ministro Florencio Randazo y, aunque se ha desmentido, las ambiciones del jefe de gabinete Juan Manuel Abal Medina, laten como corolario de su meteórica carrera que se inició hace algo más de seis años cuando Alberto Fernández lo llevó al Poder Ejecutivo, sacándolo de una oficina del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El problema de ellos y de cualquier otro candidato del cristinismo es que Ella tiende a emascularlos, apenas se entera de sus intenciones.

2013

En este escenario, en donde la carrera sucesoria se inició el mismo día en que la presidente asumió su segundo mandato, las elecciones legislativas del año que viene cobran gran interés para los que sueñan con modificar la Constitución para acomodarla a los deseos de eternización de todo gobierno populista. Si bien es cierto que se renuevan las bancas del 2009, el principal escollo para un buen desempeño electoral es que la situación económica no pareciera acompañar. En este sentido, y como una novedad, un gobierno peronista deberá enfrentar las consecuencias de políticas económicas facilistas que se pudieron tomar en un contexto muy particular y partiendo de una base, en el 2001, de muy poca expectativa.

Como resultado del cada vez menos estimulante ambiente de inversión, y la desaceleración de la actividad, el número de personas empleadas se redujo en 360.000 ocupadas, entre el último trimestre de 2011 y el primero de 2012, una cifra alarmante si se tiene en cuenta que el gobierno carece de recursos para ensayar las mismas políticas que aplicó durante la crisis del 2009. Su margen de maniobra para hacerlo es muy limitado, por no decir nulo, dado que la ausencia de superávit fiscal llevará a que un aumento del gasto público se financie con emisión monetaria del Banco Central. A diferencia de lo ocurrido en el 2009, llevar adelante una política keynesiana expansiva, en el actual contexto de desequilibrios internos, conducirá a aumentar la inflación y la brecha cambiaria mucho más que a reactivar la economía. La combinación de todos estos factores lleva a proyectar para el 2013 un escenario de estanflación.

Errores estratégicos

En su afán disciplinador, el unicato cometió dos errores: por un lado dar marcha atrás con la “doble Nelson” que le había aplicado al gobernador Daniel Scioli, para darle al fin los recursos necesarios para pagar el medio aguinaldo completo. Ese repliegue deja al descubierto la debilidad presidencial por las encuestas y la debilidad estructural de la presidente, arriba mencionada.

Otro error, fincado en cuestiones personales, es haber roto la CGT e iniciar el desgastante trabajo de dejar a Hugo Moyano lo más despojado de poder posible: eliminación del APE (programa de prestaciones especiales); apriete a los intendentes para no renovar los contratos de Covelia S.A.; pérdida del control del puerto de Buenos Aires, etc. Son mandobles que dejan al camionero sin chance más que la de tornarse en furioso opositor. Por otro lado, la CGT “antimoyanista” no logra ofrecer un panorama claro, ni de liderazgo, ni de acciones futuras, aunque reclama lo mismo que la CGT oficial.

Un tercer error se estaría consumando en estas semanas: el apriete a empresarios en razones de haber sido “colaboracionistas” durante la última dictadura “cívico-militar”. La maniobra, que implica alimentar la caldera ideológica de un sector que adhiere al kirchnerismo, tendría por objetivo perfeccionar los métodos de disciplinamiento llevados adelante por Guillermo Moreno.

Mauricio Macri ¿está?

La Ciudad de Buenos Aires asiste al segundo año de “plancha” de la gestión Macri. Mucha publicidad, obras en la vía pública para ser apreciadas por el votante; escasa capacidad de proyectar futuro y nulas definiciones políticas, han sido las constantes. La pelea por el subterráneo, los cortes de luz a los lugares públicos por falta de pago y otras inoperancias justificadas por razones de jurisdicción, dejan una imagen muy pobre de alguien que dijo alguna vez que quería ser presidente, pero que pasa la mayor parte de su tiempo viajando por el mundo.

Al igual que Daniel Scioli, Macri se victimiza, aunque quien sale al ruedo es la vicejefa María Eugenia Vidal, papel que ocupara Gabriela Michetti en su gestión anterior. Riñas con vendedores ambulantes, peleas por el destino final de la basura y otros dominan la escena de una ciudad que merece algo más que el mantenimiento de lo visible.

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